A ti te estoy hablando a ti, a ti la que no escucha, a ti que con lo que te sobra me darías la luz para encender los días, a ti que juegas a ganarme cuando sabes bien que lo he perdido todo, a ti te estoy hablando a ti aunque te importe poco, lo que estoy diciendo.
A ti te estoy hablando a ti aunque es perder el tiempo, a ti que te paso tan lejos el rigor del llanto y la melancolía, si nunca dije la verdad fue porque la verdad siempre fue una mentira, a ti te estoy hablando a ti aunque te valga madre lo que estoy diciendo.
A ti que por despecho estas pensando con los pies, a ti que me dejaste solo incluso cuando estabas en mi compañía, a ti ya no te queda nada, nada del amor tan grande que un día sentí por ti.
A ti te estoy hablando a ti tan sorda y resignada, a ti que duermes con tu orgullo y te dejas tocar por tu rencor barato, a ti que te gusta ir de mártir repartiendo culpas que son solo tuyas, a ti te estoy hablando a ti porque no hay nadie más que entienda lo que digo.
A ti que te falto el valor para pelear por ti, a ti que te consuelas con cubrirte de Channel las huellas de mis besos, a ti ya no te queda nada, nada del amor tan grande que un día sentí por ti.
A ti ya no te queda nada, y a mi me queda por lo menos, este síndrome incurable de quererte tanto.
R.A.
1 comentario:
Un buen amigo me dijo que para estar bien conmigo misma, debia "perdonarme" y para perdonarme, debía traer al presente lo que del pasado aún me duele; sólo asi, conseguiria LA PAZ INTERIOR y el olvido de esos recuerdos amargos.
Como tu eres mi amigo, te transmito este "consejo" ; por si lo quieres aplicar a tu realidad.
Un beso, amigo y sigue reflexionando en voz alta.
Mercedes
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